El hombre de jengibre

Autor: Anónimo (cuento popular)
Edad: De 4 a 6 años
Valores: Astucia, precaución, perseverancia y consecuencias de la imprudencia
Cuento corto de El Hombre de Jengibre
Había una vez una anciana que vivía en una pequeña casita en el campo. Un día, decidió hacer una galleta de jengibre con forma de hombrecito.
—¡Será la galleta más bonita y deliciosa! —dijo la anciana, sonriendo.
La anciana mezcló harina, jengibre, azúcar y mantequilla. Después, dio forma al hombrecito de jengibre, le hizo ojos con pasas, una boca sonriente con caramelo y botones de chocolate. Lo puso en el horno para que se cociera.
—¡Quedará perfecto! —exclamó la anciana mientras esperaba.
Cuando abrió el horno, el hombrecito de jengibre saltó de la bandeja y salió corriendo por la cocina.
—¡Eh, vuelve aquí! —gritó la anciana.
Pero el hombre de jengibre no se detuvo.
—¡Corre, corre, lo más rápido que puedas!
¡No puedes atraparme, soy el Hombre de Jengibre!
La anciana lo persiguió, pero no pudo alcanzarlo. El hombre de jengibre salió de la casa y corrió por el campo.
Pronto, un cerdo lo vio y dijo:
—¡Oink, oink! ¡Qué galleta tan deliciosa! ¡Te voy a comer!
—¡No me atraparás! —respondió el Hombre de Jengibre—.
¡Corre, corre, lo más rápido que puedas!
No puedes atraparme, soy el Hombre de Jengibre!
El cerdo corrió detrás de él, pero el hombrecito de jengibre era muy rápido y escapó.
Un poco más adelante, una vaca lo vio y dijo:
—¡Muu! ¡Qué galleta tan crujiente! ¡Te voy a comer!
—¡No me atraparás! —dijo el Hombre de Jengibre—.
¡Corre, corre, lo más rápido que puedas!
No puedes atraparme, soy el Hombre de Jengibre!
La vaca corrió tan rápido como pudo, pero el hombrecito de jengibre seguía corriendo.
Después, un caballo lo vio y relinchó:
—¡Qué galleta tan sabrosa! ¡Te atraparé y te comeré!
Pero el Hombre de Jengibre volvió a gritar:
¡Corre, corre, lo más rápido que puedas!
No puedes atraparme, soy el Hombre de Jengibre!
El caballo galopó tras él, pero tampoco pudo alcanzarlo.
Finalmente, el Hombre de Jengibre llegó a un río. Se detuvo porque no sabía nadar.
—¿Qué haré ahora? —se preguntó preocupado.
Entonces apareció un zorro astuto.
—¿Por qué estás tan preocupado, hombrecito? —preguntó el zorro con voz suave.
—No puedo cruzar el río. Si me mojo, me desharé —dijo el Hombre de Jengibre.
—No te preocupes —dijo el zorro—. Súbete a mi cola, y te llevaré al otro lado del río.
El Hombre de Jengibre, confiado, se subió a la cola del zorro. El zorro comenzó a nadar, pero pronto dijo:
—¡Oh, la cola se está hundiendo! Sube a mi espalda.
El hombrecito trepó a la espalda del zorro.
—¡Oh, ahora mi espalda se está mojando! Sube a mi cabeza —dijo el zorro.
El Hombre de Jengibre subió a la cabeza del zorro.
Cuando llegaron al centro del río, el zorro dijo con una sonrisa:
—¡Ahora te comeré!
Y antes de que el Hombre de Jengibre pudiera escapar, el zorro abrió su boca y ¡ñam!, se lo comió de un bocado.
Moraleja
La historia de *El Hombre de Jengibre* nos enseña que debemos actuar con prudencia y no subestimar a los demás. Ser astutos está bien, pero ser imprudentes puede llevarnos a situaciones peligrosas.
Valores aprendidos en la historia de El Hombre de Jengibre
- Astucia: El hombre de jengibre intenta escapar de sus perseguidores utilizando su rapidez e ingenio.
- Precaución: La historia nos enseña que debemos ser cuidadosos y no confiar ciegamente en desconocidos, como el zorro astuto.
- Perseverancia: El hombre de jengibre nunca se rinde mientras huye, aunque sus acciones imprudentes lo llevan a un final inesperado.
- Consecuencias de la imprudencia: La confianza excesiva y la imprudencia pueden llevarnos a situaciones complicadas o peligrosas.
Pregúntale a tu hijo y comprueba si ha entendido el cuento
- ¿Por qué el hombre de jengibre salió corriendo de la casa?
- ¿Qué animales y personas intentaron atraparlo?
- ¿Cómo logró el zorro engañar al hombre de jengibre?
- ¿Qué le sucedió al hombre de jengibre al final del cuento?
- ¿Qué aprendemos de la historia del hombre de jengibre?
Reflexión final sobre el cuento
El cuento de El Hombre de Jengibre nos enseña que la confianza excesiva y la imprudencia pueden traer consecuencias inesperadas. La historia advierte sobre la importancia de actuar con precaución y no subestimar a los demás, incluso cuando nos sentimos seguros de nuestras habilidades.
Un poco de historia sobre el cuento
¿De dónde proviene la historia de "El Hombre de Jengibre"?
El cuento es de origen europeo y tiene raíces en la tradición oral inglesa y americana. Su primera versión escrita apareció en el siglo XIX.
¿Cuál es la moraleja principal del cuento?
La historia enseña que no debemos ser imprudentes ni confiarnos demasiado de nuestras habilidades, ya que esto puede llevarnos a cometer errores.
¿Por qué el zorro logra engañar al hombre de jengibre?
El zorro usa su astucia y engaños para ganarse la confianza del hombre de jengibre, demostrando que no siempre debemos confiar en desconocidos.
¿Por qué es tan popular este cuento?
La historia es atractiva y divertida para los niños, con una secuencia repetitiva que hace fácil seguir la trama y aprender la lección.
¿Existen adaptaciones modernas de la historia?
Sí, *El Hombre de Jengibre* ha sido adaptado en cuentos ilustrados, series animadas y películas, como su divertida aparición en las películas de *Shrek*.